¿Por qué Colombia se está quedando sin energía?

Por Diario Occidente – Redacción Local

Durante 30 años Colombia no ha vuelto a vivir un apagón o racionamientos, a diferencia de países vecinos; sin embargo, diversos expertos coinciden en que el sistema eléctrico empieza a mostrar señales de alerta debido al aumento del consumo y mayor dependencia de la energía en las industrias y hogares, los retrasos en nuevos y grandes proyectos de generación y la estrechez del sistema de transmisión en algunas zonas para seguir recibiendo más energía; aspectos que están poniendo al país ante un riesgo real de desbalance entre lo que necesita y lo que produce.

“Cada vez somos más y usamos más aparatos; pero la oferta no crece al mismo ritmo”, explicó un vocero de Celsia.

“No se trata de alarmar, sino de entender que el país debe diversificar y aumentar sus fuentes, y, el mismo tiempo cuidar la energía que tiene”.

El riesgo: más consumo y una generación que no crece al mismo ritmo

El investigador Camilo Prieto Valderrama, profesor de energía y sostenibilidad de la Universidad Javeriana, señala que Colombia podría enfrentar un estrés energético en los próximos años.

“Hay un déficit de capacidad instalada porque varios proyectos eólicos que debían entrar en operación en La Guajira han sido suspendidos o retrasados. Eso representa cerca de 1.000 megavatios menos de energía para el país”, explicó.

Mientras tanto, la demanda sigue creciendo. Las ciudades, las industrias y los hogares consumen más energía que nunca, lo que obliga al sistema a operar al límite, en especial en las temporadas de sequía.

“Cuando la generación no avanza al mismo ritmo, el resultado es una mayor presión sobre el sistema y, a largo plazo, tarifas más altas”, agregó Prieto.

El tiempo ya está en contra

“La energía es como el mercado de la casa: si no lo planeamos bien, nos quedamos cortos. El problema es que ese mercado eléctrico se construye y entra a operar en plazos largos. No es solo ir a la tienda y comprar. Por eso, la planeación es importante”, explica Carlos Solano, líder Comercial y de Asuntos Regulatorios de Celsia, al indicar que, por ejemplo, una planta de generación con embalse necesita entre 5 y 8 años para su construcción y una térmica entre 3 y 4 años.

Los expertos ya hablan de estrechez y de un riesgo de racionamiento en 2026 y 2027, si se presenta una condición seca fuerte, en un contexto donde hay incertidumbre regulatoria y política para que se hagan las grandes inversiones que se requieren y la energía solar que está entrando al Sistema es insuficiente.

Según XM, operador del Sistema Interconectado Nacional, del 100% de los proyectos que deben entrar, solo están ingresando el 20%.

No solo es generación, las redes, autopistas por donde viaja la energía, también son necesarias

Muchos colombianos no lo saben; pero la energía que usamos no necesariamente se genera en cada una de las regiones.

Todo el país está conectado por una gran red eléctrica llamada Sistema Interconectado Nacional (SIN), que transporta la energía en fracciones de segundos desde los lugares donde se produce hasta donde se necesita.

Este modelo ha sido clave para que Colombia no se haya vuelto a apagar en 30 años. Sin embargo, hay algunas regiones donde esas autopistas por donde viaja la energía están saturadas y en algunos casos no tienen la capacidad para recibir más energía o en otro no tienen la capacidad suficiente para seguir atendiendo la expansión de la demanda de este suministro; es decir, brindarles energía a más clientes.

En este sentido, el Valle del Cauca cuenta con unas redes de transmisión y distribución de energía confiable debido a las inversiones anuales recurrentes que hace Celsia, lo cual se traduce en que esta sea una región donde la gente cuenta con la mejor calidad del servicio;

Según XM tenemos hasta 13 años de retraso en transmisión nacional y hasta 11 años en regional; y en 2024, el 55% de los proyectos de expansión de redes se retrasaron y el 94% de las nuevas conexiones fueron rechazadas por falta de capacidad del sistema.

¿Qué se necesita para evitar un apagón en Colombia?

La Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF) subraya la necesidad de una política energética integral con reglas claras que den confianza a los inversionistas y aseguren una transición sostenible.

En ese sentido, el papel del Gobierno es clave, especialmente en agilizar los trámites de licenciamiento ambiental y la concertación con las comunidades, para que los proyectos avancen de manera eficiente.

Igualmente, se requiere cualificar el acompañamiento de agencias como ANLA, CREG y el Ministerio de Ambiente, y coordinar la presencia estatal en los territorios para prevenir bloqueos y problemas de orden público.

Otro elemento importante es garantizar el acceso continuo a gas para las plantas térmicas. Este combustible es vital para respaldar la generación durante la sequía.

Los expertos también señalan que se deben impulsar nuevas subastas de energía firme y ofrecer incentivos para las inversiones en tecnologías renovables, como la solar y la eólica.

Esto, junto con un manejo responsable del agua en los embalses, es clave para garantizar la estabilidad energética.

Lo que pueden hacer los usuarios

Celsia recuerda que todos podemos contribuir al equilibrio del sistema desde el hogar con prácticas sencillas:

• Desconecta los equipos que no usas.

• Cambia los bombillos por LED.

• Usa racionalmente aire acondicionado y calentadores.

• Desconecta los cargadores si no los estás usando.

• No dejes cargando el celular toda la noche.

• Modera el volumen de los equipos de sonido.

• Ten electrodomésticos eficientes en el consumo de la energía.

• Revisa tu consumo mensual y evita sobrecargas.

“Ahorrar energía no solo baja la factura, también protege el agua y mantiene estable el sistema que nos conecta a todos”, enfatiza la empresa.

Un mensaje final

Las energías renovables no convencionales, en especial la solar, están avanzando; pero su intermitencia debido a que dependen de factores que fluctúan constantemente como el sol y el viento, son aspectos que se deben considerar en la operación del sistema eléctrico y compensar con la estabilidad y energía en firme que brindan las plantas térmicas a gas, y las plantas hidroeléctricas con embalses, como las que cuenta Celsia en el Valle del Cauca, Tolima y Cauca: Alto Anchicayá, Calima, Prado y Salvajina.

Así como estas hay alrededor de 20 plantas más con embalse en el país.

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